Este tratamiento se utiliza para tratar el desprendimiento de la retina y consiste en colocar una sonda que cauteriza por congelación los tejidos endooculares. La criocoagulación se emplea para tratar el desprendimiento de la retina y tumores intraoculares, entre otros, pero hoy en día está prácticamente en desuso por el uso de otras técnicas quirúrgicas más avanzadas.