El glaucoma es una enfermedad ocular que se caracteriza generalmente por el aumento patológico de la presión intraocular por falta de drenaje del humor acuoso, aunque éste no es el único motivo. Es una neuropatía óptica caracterizada por la pérdida progresiva de fibras y cambios del aspecto del nervio óptico.
Si el glaucoma no se trata, provoca un deterioro irreversible de la visión y puede llegar a derivar en ceguera. Tiene una prevalencia del 2% de los pacientes mayores de 40 años. Actualmente representa la segunda causa de ceguera en todo el mundo.
Principales factores de riesgo
Existen una serie de circunstancias relacionadas con un mayor riesgo de sufrir glaucoma:
- Hipertensión ocular: presión intraocular mayor de 21 mmHg.
- Edad: a partir de los 60 anys, el riesgo aumenta.
- Antecedentes familiares: multiplican casi por 4 el riesgo de la población general.
- Miopías altas.
- Grosor corneal delgado.
- Factores vasculares: diabetes, hipertensión arterial, migrañas, enfermedades reumatológicas, entre otros.
- Pacientes que estan tomando corticoesteroides.
- Signos en el ojo de obstrucción del ángulo: pseudoexfoliación (material proteico) y pigmento.
GLAUCOMA DE ÁNGULO ABIERTO’ANGLE OBERT
La malla trabecular es una estructura que se encuentra en el ángulo iridocorneal y se encarga del drenaje del humor acuoso. En el caso del glaucoma de ángulo abierto, esta malla es visible en la exploración con gonioscopia, pero su funcionamiento no es el adecuado. Por tanto, el humor acuoso se forma de forma más rápida de lo que se evacúa, de forma que se acumula dentro del ojo y aumenta su presión.
El glaucoma primario de ángulo abierto es aquel en el que no identificamos una causa directa de este mal funcionamiento. Por otro lado, pueden aparecer glaucomas secundarios de ángulo abierto en los que existe una causa directa identificable:
- Glaucoma pseudoexfoliativo: se acumula material escamoso que se forma en las capas externas del cristalino en la malla trabecular, de forma que se obstruye parcialmente y dificulta su drenaje.
- Glaucoma pigmentario: se acumula pigmento que se desprende del iris a la malla trabecular y también dificulta el drenaje por parte de ésta.
- Glaucoma neovascular: se forman vasos sanguíneos en el iris o en los canales de drenaje del ojo. Está asociado a la retinopatía diabética, trombosis de la vena central de la retina y el síndrome isquémico ocular.
- Glaucoma traumático: puede aparecer al principio o años después por recesión angular.
- Glaucoma corticoides: los corticoides son fármacos antiinflamatorios que pueden incrementar la presión intraocular.
- Glaucoma uveítico: la uveítis es una inflamación del ojo en la que puede haber hipertensión debido a la inflamación misma o al tratamiento inflamatorio (corticoides).
En este grupo también podemos encontrar el glaucoma normotensivo. Se produce en personas que tienen la presión igual o inferior a 21 y desarrollan glaucoma con características y síntomas muy similares al glaucoma primario de ángulo abierto. Se desconocen las causas que lo provocan, aunque los tratamientos dirigidos a reducir la tensión ocular son útiles para su control.